Los Hornets se hicieron fuertes en su casa y vencieron 3-2 a un Everton que no logra hacer pie en la liga y sólo ganó un encuentro de los últimos once. En otros encuentros, repletos de goles, hubo triunfos de Sunderland y Burnley y un camaleónico 3-3 entre Hull y Crystal Palace. Mirá el resumen del resto de la fecha 15.
El sábado en Inglaterra tuvo un par de noticias interesantes en la pelea, con la victoria de Arsenal y la derrota de Manchester City a manos de Leicester. Sin embargo, en los restantes cotejos de la jornada 15 de Premier League hubo muchos, pero muchos goles y más de un partido vibrante. En primer turno, Watford se cargó a un Everton de capa caída y anhela puestos de Europa League. Por su parte, Swansea metió un triunfo clave ante Sunderland que lo aleja momentáneamente de los puestos de descenso directos. Los otros dos cotejos fueron un emocionante empate a tres entre Hull City y Crystal Palace y una buena victoria de Burnley, otro que se aleja de abajo, ante Bournemouth.
Watford se aprovechó del presente de Everton
Los dirigidos por Walter Mazzarri lograron una nueva victoria en Vicarage Road, lugar donde se hacen fuertes, para alimentar su buena campaña y de paso profundizar el mal momento del conjunto azul de Liverpool. Un arranque de partido con posesión repartida presentó a un local con pocos argumentos ofensivos, mientras que los Toffees, aunque tampoco produjeron mucho, se veían algo más punzantes. En dieciséis minutos y mediante su mejor acción en la primera parte, los visitantes se pusieron en ventaja. Gareth Barry asistió con un magnífico pase por arriba de la defensa a Romelu Lukaku, que controló muy bien y definió mejor ante la salida de Heurelho Gomes. Tras el 0-1, Watford empezó a dominar las acciones, inquietando por el sector derecho a través de un activo Nordin Amrabat. El marroquí primero tiró un venenoso envío que Troy Deeney no pudo aprovechar, y un par de minutos más tarde protagonizó la acción del empate. El extremo desbordó por derecha y sacó un envío dirigido a Stefano Okaka, que llegando de frente al arco utilizó un muy lindo taco para decretar la igualdad en el marcador. Los Hornets se aprovecharon de ese impulso y pudieron haber aumentado la cuenta cuando Adlene Guedioura le puso una pelota colgada a Deeney, quien increíblemente no remató bien desde casi el área chica.
En la segunda mitad el conjunto local salió más decidido y, después de merodear el área unos minutos, se puso en ventaja. Un tiro libre desde la izquierda de José Holebas halló la cabeza de Sebastian Prödl, que vía aérea puso el 2-1 para el dueño de casa. Otra pelota parada, esta vez ejecutada por Etienne Capoué, pudo haber ampliado la brecha. Tras el centro del francés al segundo palo, Miguel Britos tuvo el tercero entrando por atrás, pero Stekelenburg se lo negó. Sin embargo, ese mismo córner trajo el tanto que definió la cuestión. Nueva asistencia de Holebas, enviándola al primer palo en donde Okaka anticipó para decretar su doblete y el 3-1. El entrenador visitante Ronald Koeman ingresó a Aaron Lennon, Ross Barkley y Enner Valencia intentando cambiar la historia, y logró que la última parte del choque mostrase al elenco azul yendo a buscar ante unos Hornets más replegados. Los visitantes avisaron en un par de ocasiones, primero con un centro de Gerard Deulofeu que Lukaku no pudo contactar y luego con un cabezazo de Valencia que salió cerca. Un par de minutos más tarde, los Toffees se pusieron a tiro en el marcador: un envío de Lennon al centro del área fue conectado de cabeza por Lukaku y dejó plantado a Gomes. Sin embargo, el empuje de Everton no fue suficiente y Watford terminó llevándose una victoria importante para alimentar su buena campaña hasta ahora e ilusionarse con Europa League. Los de Koeman, por su parte, ganaron uno de los últimos once y pueden terminar la fecha fuera de puestos europeos.
Swansea ganó y salió del descenso
En el Liberty Stadium hubo un duelo clave por la permanencia en el que los Swans salieron victoriosos más trabajadamente de lo que indica el marcador final. Una primera parte pareja planteó por un lado a un elenco galés más preocupado por elaborar y sin demasiada pegada arriba, mientras que por el otro Sunderland apostaba al juego directo buscando a la dupla Víctor Anichebe-Jermain Defoe. La primera nítida fue para el visitante en una rápida réplica culminada con un disparo de zurda de Defoe que salió cerca, tras recibir la asistencia de su compañero de ataque. Al dueño de casa le costó entrar y solamente logró generar peligro tras un centro de Wayne Routledge que Gylfi Sigurdsson conectó a medias y Lamine Kone rechazó con lo justo. La etapa final estuvo mas movida, con el visitante muy cerca de golpear primero en el inicio. Defoe recibió de Patrick van Aanholt y sacó un derechazo que se marchó a un metro del palo de Lukasz Fabianski. En la respuesta a ese ataque, Swansea encontró la jugada que cambió el partido en su favor. Jason Denayer dejó el brazo muy alto en un centro de Routledge y el árbitro Craig Pawson sancionó un penal que fue transformado en el 1-0 por Sigurdsson. Moudou Barrow recuperó, combinó con Sigurdsson que le puso un gran pase y definió mano a mano, pero Jordan Pickford se lució enviando su tiro al córner. Sin embargo, el joven arquero nada pudo hacer en la acción posterior, ya que el tiro de esquina por debajo de Sigurdsson halló a Fernando Llorente y el español no perdonó. La pegada del islandés volvió a hacer estragos más tarde con un tiro libre preciso a la cabeza de Jordi Amat, cuyo testazo fue salvado por Pickford. Finalmente, a falta de diez minutos, los galeses definieron la cuestión. Un desborde y posterior centro bombeado de Jefferson Montero ubicó a Llorente, que puso el 3-0 y su cuarto tanto en los últimos dos juegos en el Liberty Stadium. La última del duelo fue un intento de Defoe dentro del área, pero el inglés no tuvo una tarde certera y se perdió el descuento. Buena victoria de los Swans ante un rival directo, que los saca provisoriamente de los puestos de descenso, a la espera de lo que haga West Ham mañana.
Premier de la buena en Hull
El KC Stadium brindó un duelo emocionante por donde se lo mire entre dos equipos que quieren quedarse una temporada más en la máxima categoría. Robert Snodgrass inventó una falta al tirarse groseramente en el área, fingiendo un contacto de Scott Dann. El juez Mike Jones se lo tragó y sancionó penal, situación ante la que el escocés no dudó, aprovechando su gran pegada para poner el 1-0 del local. En inicio de la segunda parte, el Palace contestó por la misma vía. Wilfried Zaha fue bajado en el área por Snodgrass -paradójicamente- y Christian Benteke puso las cosas 1-1 al ejecutar con mucho temple. Adama Diomandé tuvo un par de ocasiones para adelantar a su equipo, pero no estuvo fino para encontrar el arco en ninguna de ellas. A veinte del final, Zaha inició lo que sería un final a puro vértigo. El extremo tomó el rebote de un córner y, tras gambetear a dos rivales, sacó un derechazo furibundo que vulneró la resistencia de David Marshall. Los Tigers demoraron tan sólo dos minutos en responder, también con un gran gol. Diomandé se tomó revancha de las oportunidades perdidas al recibir de espaldas, dejar pintado con su giro a Dann y someter a Wayne Hennessey. Cinco minutos más tarde, el marcador volvió a darse vuelta: Jake Livermore jugó una pared con Snodgrass, se metió en el área con demasiada libertad ante la pasividad defensiva de los Eagles y metió un zurdazo bajo que puso las cosas 3-2. No obstante, Crystal Palace siguió luchando y a falta de un minuto logró rescatar un punto de la mano de un integrante del banco. Frazier Campbell, en apenas su tercera aparición liguera, cabeceó un centro de Zaha y dejó estático a Marshall y a toda la parcialidad local, que creía casi adentro una victoria que no fue. El encuentro se fue sin dejar conforme a ninguno, pero los Tigers sintieron más esos puntos perdidos ya que pasarán otra semana en zona de descenso.
Triunfazo de Burnley
Los Clarets siguen escapándole con éxito a los puestos comprometidos, y en la jornada de hoy consiguieron una victoria más que importante ante Bournemouth. En el inicio, el equipo de Eddie Howe lució mejor, con una clara oportunidad de Benik Afobe tras un tiro bloqueado de Ryan Fraser, pero apareció Tom Heaton para negarle el gol al ex Arsenal. A pesar de ese mejor inicio visitante, una ráfaga de tres minutos le dio al local una buena ventaja que utilizaron para manejar el encuentro. A los doce, Jeff Hendrick recibió un pase profundo de Matthew Lowton y, al quedarle un poco alta tras controlar, el irlandés decidió meter una volea que se coló por el primer palo de Artur Boruc. En el cuarto de hora de juego, el cuadro vinotinto pegó mediante un balón parado. Un córner cabeceado por Ben Mee fue rechazado pobremente por Boruc, algo que Stephen Ward aprovechó para poner el 2-0. El partido estuvo más controlado por el dueño de casa tras esos dos tantos, pero justo sobre el final de la etapa los Cherries llegaron al descuento. Tras una paciente construcción, Harry Arter abrió con Simon Francis y éste colocó un envío exacto hacia donde se ubicaba Afobe, quien descontó justo antes del descanso. Al inicio del complemento el autor del descuento tuvo una chance de igualar el partido, pero su disparo salió desviado. En un duelo parejo, los ingresos de Ashley Barnes y Andre Gray inclinaron un poco la balanza en favor de Burnley. El primero tuvo el gol en su intervención inicial, pero su disparo de volea salió apenas arriba, mientras que el segundo también perdió la chance de anotarse en el tanteador al recibir en el área y rematar al cuerpo de Boruc. Sin embargo Gray tuvo revancha y fue artífice del gol clave del partido: tomó una pelota perdida y asistió de taco a George Boyd, quien con una eléctrica diagonal seguida de un potente zurdazo decretó el 3-1. Los Cherries intentaron acortar la diferencia en el final y, tras un tanto anulado a Afobe, lograron un gol que les dio un dejo de esperanza. Luego de un córner sacado en corto, Marc Pugh encontró a Charlie Daniels, que se giró y sacó un remate que dejó sin chances a Heaton. No hubo tiempo para más y la gente en Turf Moor desató su alegría por tres puntos que alejan a los Clarets de abajo y lo ilusionan con sobrevivir.
Foto destacada: Goal.com
